Complicaciones
Las pacientes con síndrome antifosfolípido tienen un alto riesgo de complicaciones en el embarazo, incluida la pérdida del embarazo. El manejo requiere de cuidados especializados multidisciplinarios (hematología, obstetricia y reumatología).
Las pacientes con síndrome antifosfolípido tienen un alto riesgo de complicaciones en el embarazo, incluida la preeclampsia. El manejo requiere de cuidados especializados multidisciplinarios (hematología, obstetricia y reumatología).
Las pacientes con síndrome antifosfolípido tienen un alto riesgo de complicaciones en el embarazo, que incluye restricción del crecimiento intrauterino. El manejo requiere de cuidados especializados multidisciplinarios (hematología, obstetricia y reumatología).
Las pacientes con síndrome antifosfolípido tienen un alto riesgo de complicaciones en el embarazo, incluido el desprendimiento prematuro de placenta. El manejo requiere de cuidados especializados multidisciplinarios (hematología, obstetricia y reumatología).
Los pacientes con síndrome antifosfolípido tienen un alto riesgo de trombosis recurrente después de la suspensión de la anticoagulación, por lo cual la recomendación es continuar con la anticoagulación a largo plazo.[44]
Los pacientes con síndrome antifosfolípido tienen un alto riesgo de trombosis recurrente después de la suspensión de la anticoagulación, por lo cual la recomendación es continuar con la anticoagulación a largo plazo.[44]
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