Tuberculosis extrapulmonar

Durante el tratamiento, los pacientes deben ser monitoreados mensualmente para evaluar los síntomas, el cumplimiento con los medicamentos y el peso (con cambios de dosis según sea necesario). Es posible que se recomienden pruebas mensuales de función hepática (LFT, por sus siglas en inglés) para aquellos con LFT iniciales anormales, consumo crónico de alcohol, hepatotoxicidad potencial, otras enfermedades o lesiones hepáticas (por ejemplo, hepatitis viral) o infección por VIH.[48]Nahid P, Dorman SE, Alipanah N, et al. Official American Thoracic Society/Centers for Disease Control and Prevention/Infectious Diseases Society of America clinical practice guidelines: treatment of drug-susceptible tuberculosis. Clin Infect Dis. 2016 Oct 1;63(7):e147-95. https://cid.oxfordjournals.org/content/early/2016/07/20/cid.ciw376.full.pdf+html http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/27516382?tool=bestpractice.com ​ Los pacientes que toman etambutol son monitoreados para detectar alteraciones visuales y necesitarán controles mensuales de la vista. En los pacientes con meningitis tuberculosa, se realizan repetidas punciones lumbares para monitorizar los cambios en el recuento celular y de glucosa y proteínas.

Al finalizar el tratamiento, los pacientes pueden someterse a un seguimiento por estudios de imagen que sirva como uno nuevo valor inicial. En los pacientes con tuberculosis multirresistente, se recomienda un seguimiento cercano durante 2 años después de la finalización del tratamiento.