Desprendimiento prematuro de placenta

Si hay desprendimiento prematuro de placenta en gestaciones pretérmino, se puede implementar un manejo conservador en los casos en que tanto la madre como el feto estén estables. Los casos deben manejarse según cada caso, según la situación clínica y el riesgo de resultados adversos. En estos casos es necesario ejercer una monitorización y evaluación estrechas del estado de la madre y del feto. Esto incluye la combinación de ecografías, monitorización de la frecuencia cardíaca del feto y perfiles biofísicos a intervalos regulares. Ocasionalmente, la madre puede manejarse de forma ambulatoria, pero solo si está estable y es responsable. Se le deberá indicar que debe informar de inmediato en caso de presentar sangrado, dolor abdominal intenso, contracciones o disminución de los movimientos fetales.

La patología placentaria puede proporcionar un indicio respecto a la etiología y fisiopatología del desprendimiento. Se pueden encontrar lesiones, como la trombosis de placenta, los depósitos perivellositarios de fibrina, los infartos y las lesiones deciduales.