Las lesiones en la ingle son más frecuentes en los deportes como fútbol americano, hockey sobre hielo y rugby, pero pueden verse en la mayoría de los deportes en los que se debe correr, girar y saltar. Representan del 5% al 18% de todas las lesiones relacionadas con el deporte.[2]Karlsson J, Sward L, Kalebo P, et al. Chronic groin injuries in athletes: recommendations for treatment and rehabilitation. Sports Med. 1994;17:141-148.
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/8171224?tool=bestpractice.com
[3]Renstrom P, Peterson L. Groin injuries in athletes. Br J Sports Med. 1980;14:30-36.
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/7378668?tool=bestpractice.com
[4]Hölmich P. Adductor-related groin pain in athletes. Sports Med Arthrosc. 1997;5:285-291.[5]Robertson BA, Barker PJ, Fahrer M, et al. The anatomy of the pubic region revisited: implications for the pathogenesis and clinical management of chronic groin pain in athletes. Sports Med. 2009;39:225-234.
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/19290677?tool=bestpractice.com
Un estudio prospectivo de siete temporadas con jugadores de fútbol masculino de primera división encontró que las lesiones en la cadera/ingle representaban del 12% al 16% de todas las lesiones.[6]Werner J1, Hägglund M, Waldén M, et al. UEFA injury study: a prospective study of hip and groin injuries in professional football over seven consecutive seasons. Br J Sports Med. 2009;43:1036-1040.
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/19945984?tool=bestpractice.com
En total, la incidencia fue de 1.1/1000 horas, donde los partidos aportaron un número de 3.5/1000 horas. Las lesiones relacionadas con el aductor fueron mucho más frecuentes, seguidas por las lesiones en el psoas ilíaco. Un estudio con jugadores de fútbol americano de segunda división halló el mismo patrón, con una mayor frecuencia de lesiones en la ingle relacionadas con el aductor, seguidas por lesiones en el psoas ilíaco y lesiones abdominales.[7]Hölmich P1, Thorborg K, Dehlendorff C, et al. Incidence and clinical presentation of groin injuries in sub-elite male soccer. Br J Sports Med. Br J Sports Med. 2014;48:1245-1250.
http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/23956334?tool=bestpractice.com
La incidencia fue menor, con un total de 0.4 lesiones/1000 horas.