Monitorización

La mayor parte de los pacientes no precisa de monitorización. Se debe considerar algún diagnóstico alternativo si los síntomas persisten durante más de 2 semanas. Se debe realizar una radiografía del tórax si la tos persiste durante más de 4 semanas. Si se produjeron complicaciones, tales como otitis media o sinusitis resultantes de episodios previos, se debe someter al paciente a mayor grado de vigilancia. Si hay antecedentes de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) o neumonía previa, puede ser necesario un mayor grado de vigilancia por si se pudieran producir infecciones superpuestas y complicaciones más graves, como cáncer de pulmón. Si el paciente presenta fiebre, taquicardia e hipotensión y/o rigidez en el cuello, se le debe derivar inmediatamente al hospital y/o administrar antibióticos parenterales si existe sospecha de septicemia meningocócica.

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