Tapón de cerumen

Es preciso desaconsejar a los pacientes el uso de bastoncillos de algodón para limpiarse los oídos ("evite introducir en el oído nada más pequeño que el codo, con excepción de una prótesis auditiva").

Durante algunas noches antes de la siguiente visita al médico, los pacientes pueden aplicar en cada oído unas cuantas gotas de aceite mineral, aceite de oliva o solución salina con el fin de ablandar el cerumen.

Para esto, pueden usar alguno de los kits de eliminación de cera de venta libre, que generalmente incluyen un agente cerumenolítico y una pequeña jeringa para irrigar el conducto auditivo externo.