Criterios
Definición clínica de tapón de cerumen de la American Academy of Otolaryngology/Head & Neck Surgery[1]
Los médicos deben diagnosticar un tapón de cerumen cuando la acumulación de cerumen causa síntomas, impide la realización de una evaluación necesaria del oído o ambos.[1] Por ejemplo, una acumulación de cerumen se considera tapón si causa síntomas de plenitud auricular o pérdida de la audición o si impide la visualización adecuada de la membrana timpánica en un paciente con síntomas de vértigo. También se haría un diagnóstico de tapón de cerumen si el cerumen fuera lo suficientemente extenso como para impedir la realización de una prueba, como la videonistagmografía, para el diagnóstico de vértigo; para realizar esa prueba, el conducto auditivo externo tiene que ser permeable y no estar obstruido por el cerumen. Sin embargo, si el cerumen estuviera presente en el conducto auditivo externo, pero el paciente no expresara síntomas relacionados con el oído, y una visión sin obstrucciones de la membrana timpánica no fuera esencial para una buena atención, el cerumen no se consideraría "tapón" según esta definición.
El uso de este contenido está sujeto a nuestra cláusula de exención de responsabilidad