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Demostración animada de la intubación traqueal
Cómo insertar un tubo traqueal en una persona adulta utilizando un laringoscopio.
Equipo necesario
Equipo de protección personal, guantes incluidos
Laringoscopio (asegúrese de que la luz esté funcionando)
Tubo traqueal con manguito; un adulto de tamaño promedio requerirá un tubo traqueal con manguito de tamaño 7 u 8, que corresponde a un diámetro interno de 7 u 8 mm. (La intubación pediátrica se realiza con tubos sin manguito y la debe realizar un médico experimentado.)
Jeringa para inflar y desinflar el manguito (asegúrese de que el manguito se infla y desinfla antes de la intubación)
Aparato de bolsa-válvula, incluida la máscara para la preoxigenación
Succión
Oxígeno
Monitorizar el CO2 espiratorio final (si está disponible)
Cinta de algodón para fijar el tubo
Ventilador
Pinzas Magill (en caso de que haya material extraño en la orofaringe)
Elástico de goma (para usar como alambre guía en caso de intubación difícil)
Contraindicaciones
La falta de personal cualificado y experimentado es una contraindicación; la intubación traqueal solo debe utilizarse cuando se disponga de personal capacitado para llevar a cabo el procedimiento, con un alto nivel de destreza y seguridad.
Tome nota: el laringoespasmo debido a anafilaxia, una quemadura por inhalación, el cuasi-ahogamiento o un cuerpo extraño no mejorarán notablemente con un manejo simple de las vías respiratorias, y ocasionalmente puede que la intubación traqueal ni siquiera sea posible. En este caso, el paciente puede necesitar un procedimiento avanzado de las vías respiratorias como la cricotiroidotomía.
El tubo traqueal ha sido generalmente considerado el método óptimo para el manejo de las vías respiratorias durante un paro cardíaco, y está indicado en un evento de reanimación en curso. Permite realizar compresiones torácicas continuas, sin pausas durante la ventilación. La mayoría de los pacientes con retorno de la circulación espontánea permanecen en coma y requieren intubación traqueal y ventilación mecánica.[223]
La intubación traqueal también se utiliza para el manejo de las vías respiratorias durante la anestesia general.
Complicaciones
Los intentos de intubación traqueal realizados por personas inexpertas pueden tener consecuencias negativas para el paciente. La incidencia de la intubación incorrecta varía con la experiencia, algunos estudios muestran que las tasas de intubación esofágica accidental pueden llegar hasta el 50% en manos inexpertas.[224] Los daños derivados de la intubación esofágica no reconocida pueden evitarse reduciendo la tasa de intubación esofágica, junto con la detección rápida y la actuación inmediata cuando se produce.[225] La detección de dióxido de carbono exhalado de forma sostenida mediante capnografía de ondas es la principal prueba diagnóstica utilizada para excluir la colocación esofágica de un tubo traqueal previsto.[225]
Las complicaciones de la intubación traqueal incluyen:
Intubación fallida
Lesiones en la médula espinal y en la columna vertebral
Oclusión de la arteria central de la retina y ceguera
abrasión corneal
Traumatismo en los labios, dientes, lengua y nariz
Hipertensión, taquicardia, bradicardia y arritmia
Aumento de la tensión intracraneal e intraocular
Laringoespasmo
Broncoespasmo
Aspiración
Traumatismo laríngeo
Avulsiones de médula, fracturas y dislocación del aritenoides
Perforación de las vías respiratorias
Traumatismo nasal, retrofaríngeo, faríngeo, uvular, laríngeo, traqueal, esofágico y bronquial
Intubación esofágica
Intubación bronquial.
Cuidados en salud al alta hospitalaria
Si el tubo no se coloca correctamente, es posible que apenas el estómago o el pulmón derecho sean ventilados. Desinfle el manguito y vuelva a colocar el tubo; auscultar de nuevo para comprobar la posición.
Continúe reanimando al paciente conforme a las directices de soporte vital, empleando los principios ABCDE.